-Apagón analógico
Mural
Vania Guerrero
5 de julio de 2014
Aunque el dictamen de la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión mantiene el plazo constitucional para llevar a cabo el apagón analógico el 31 de diciembre de 2015, también complica su realización y afecta a un sector de la población.
De acuerdo con lo establecido en el artículo 19 transitorio del dictamen, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) deberá concluir la transmisión de señales analógicas de televisión abierta una vez que se alcance un nivel de penetración de 90 por ciento de hogares con escasos recursos definidos por la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) con receptores o decodificadores aptos para recibir la señal.
Esto es contrario a la política vigente de Transición a la Televisión Digital Terrestre, que establece que el nivel de penetración tendrá que ser de 90 por ciento en el total de hogares con televisión abierta, no solamente los hogares considerados por la Sedesol.
Analistas señalaron que así, el dictamen no permite conocer los datos reales de penetración total de señal digital en los hogares, ya que requiere que sólo se mida en los de escasos recursos.
“Esa medición con base en hogares de bajos recursos hará que no se tengan datos reales sobre la verdadera penetración y por lo tanto será un argumento para postergar las fechas previstas en el mandato constitucional del 31 de diciembre de 2015”, comentó Gabriel Sosa Plata, experto en radiodifusión.
En su programa de trabajo para el apagón analógico, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) indica que de los 31 millones de hogares en el País, un 69 por ciento tiene solamente televisores analógicos, lo que equivale a 15.3 millones de casas.
Sin embargo, de ellos, sólo 12.6 millones está en el padrón de la Sedesol que se usará para efectos del apagón analógico.
Respecto a las diferencias de medición entre lo que indica la Política de TDT y lo planteado en la ley, Ramiro Tovar, experto en telecomunicaciones, dijo que abre la puerta a que no se tome en cuenta a una parte de la población.
“Es una forma de tolerar que no se tenga una penetración universal”, expuso.
En su sesión del 28 de abril de este año, el IFT decidió no autorizar el apagón analógico en cinco ciudades del norte y cambiar las fechas del calendario previsto en la política vigente de Transición a la Televisión Digital Terrestre (TDT).
Ésto, debido a que los niveles de penetración de televisión en dichas ciudades es de 56 por ciento en Monterrey; de 77 en Ciudad Juárez; de 54 en Reynosa; de 59 en Matamoros; y 67 en Nuevo Laredo. Lo anterior, tomando en cuenta todos los hogares con televisión, no sólo los del padrón de Sedesol.
“La política nos marca que si un mes antes (del apagón) no existen elementos de convicción para determinar que, al menos, el 90 por ciento de las personas que dependen del servicio de televisión abierta cuentan ya con el servicio de televisión digital, tenemos que tomar la decisión (de no apagar)”, dijo el comisionado Fernando Borjón, de acuerdo con la versión estenográfica de la sesión.
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