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PAN
La Jornada Jalisco
Julio Ríos
07 de mayo del 2015
De 35 a 50 alcaldías: meta del PAN
En Jalisco, al PAN le pasa algo parecido que a Morena. Mientras que las mediciones reflejan un crecimiento de ambos (el blanquiazul le disputa el liderazgo al PRI y Morena amenaza con desbancar al PRD), en Jalisco no prenden en las encuestas que se han dado a conocer.
Sin embargo, algunos panistas son optimistas. No sólo acusan a las encuestas de estar “cuchareadas”. Señalan que en la calle encuentran un panorama muy diferente que el que los comunicadores -o el círculo rojo- hemos esbozado dentro de nuestra burbuja.
En las calles -dicen- no encuentran la preferencia avasalladora que dice tener Enrique Alfaro y también detectan mucho descontento con el PRI. Y eso los alienta. Además de que creen que Alfonso Petersen estará mucho mejor que lo que los sondeos auguran.
Actualmente, los panistas encabezan 22 ayuntamientos. Liderazgos que se encargan de la operación electoral a nivel estatal tienen la expectativa de obtener por lo menos 35 municipios. Aunque hay quien me ha dicho que 50, lo cual ya parece difícil.
En la Zona Metropolitana sus esperanzas las fincan en Zapopan y Tonalá. A las encuestas de los periódicos -volvemos a lo mismo- no les creen. Y una posible victoria en Tlajomulco, sustentada en la coalición con el sol azteca, también les emociona.
En el interior del estado tienen esperanzas en Autlán -donde el candidato es Paco Gómez, un joven al estilo de la región: de esos que les gusta la Fiesta Brava como dicta la tradición local-; Arandas –con Yadira Guzmán y su campaña innovadora- y en municipios de Los Altos como Jalostotitlán, con Lupe Romo, y Yahualica, con Antonio Íñiguez (hermano del actual alcalde José Luis Íñiguez y sobrino del cardenal Juan Sandoval Íñiguez).
En Lagos de Moreno, Paco Torres Marmolejo quiere volver a ser alcalde. Para lograrlo, hasta ministro de la comunión se volvió en la iglesia local. Eso dicen los operadores del PAN, que afirman que han subido sus bonos de popularidad y tienen expectativas de triunfo. La misma situación viven en San Juan de Los Lagos, donde el empresario avícola Alejandro de Anda ya fue presidente municipal y va por la segunda, con posibilidades.
Sin embargo, hay municipios donde los encargados de la operación electoral panista a nivel estatal ya auguran una derrota. Uno de ellos es Tepatitlán, donde se subdividió el voto blanquiazul, pues buena parte apoyará a Movimiento Ciudadano y otra parte a la ex alcaldesa Susana Jaime que se postuló por el conservador Partido Humanista. Esto, calculan, desembocaría en una victoria del priísta Alejandro González, cuyo voto duro está intacto.
En Puerto Vallarta, la candidatura de Juan José Pery Cuevas García no ha levantado como esperaban los jerarcas del Comité Estatal y parece que el priísta Andrés González Palomera va en caballo de hacienda a la victoria. Admiten que hay que enfocar ahí las baterías.
Esas son las ilusiones y los mea culpae del panismo. Insisto: se dicen optimistas, pues ya no les puede ir peor que en el 2012. ¿Será?
“Los malos panistas (los de Emilio) están con Alfaro”
La hemorragia blanquiazul que terminó con la salida de varios panistas para arrojarse a los brazos de Enrique Alfaro no afectará al Partido Acción Nacional en los próximos comicios. Al contrario, fue útil para que saliera la pus. Léase personajes afines al ex gobernador -de tristes recuerdos- Emilio González Márquez. Así lo dijo ni más ni menos que Alfonso Petersen durante un debate organizado por un diario local.
“No nos interesa en lo absoluto recuperar a los panistas que están con Alfaro. Son los panistas que ofendieron a la gente, que se unieron a los moches, son los panistas que lamentablemente lastimaron tanto al partido y que nos lo dejaron como hoy lo tenemos. Yo le agradezco a Enrique Alfaro, agradecemos a Movimiento Ciudadano que haya hecho ese ‘partido barredora’ que tanto daño nos hizo”, dijo Petersen.
Leamos entre líneas. ¿Por qué no dijo nombres? Cuando habla de quienes pedían moches, se refiere a Alberto Esquer, candidato a la presidencia municipal de Ciudad Guzmán por Movimiento Ciudadano. Recordemos que en 2011, Miguel Castro -que entonces encabezaba la asociación de alcaldes priístas de Jalisco- acusó a Esquer -que era diputado federal- de exigir dinero a los ediles del Distrito 19, a cambio de gestionarles presupuesto federal para obra pública.
Y respecto a los que ofendieron a la gente, ese saco puede quedarles a los allegados a su ex patrón Emilio González y al súper secretario Hebert Taylor, como es el caso del ex secretario Diego Monraz Villaseñor. Otro es el ex presidente del blanquiazul tapatío, Manuel Romo.
Y de paso se llevó de corbata a Macedonio Támez Guajardo, quien por cierto, hace campaña en solitario en el Distrito 10. Abandonado a la buena de Dios por los alfaristas que primero lo “cilindrearon” para renunciar al PAN con el canto de las sirenas de que sería candidato a alcalde de Zapopan, pero a la hora de la hora lo dejaron rascarse con sus propias uñas.
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