Telefónica se desiste de denuncia contra Telcel

Homo Zapping

El Zappo

24 de octubre de 2014

 

El día de ayer, a unas horas de que el Instituto Federal de Telecomunicaciones informara sobre el inicio de una investigación en el mercado de distribución y comercialización de recargas móviles, Telefónica México se desistió de la la denuncia que interpuso en contra de Telcel por prácticas monopólicas.

A través de un breve comunicado de prensa, la empresa insormó que desde hace varias semanas acordó con Blue Label México, empresa participada por Grupo Bimbo, la comercialización de recargas móviles en más de 70 mil puntos. Por esta razón, “Telefónica México comunicó al IFT su desistimiento de la denuncia que promovió”.

La denuncia en cuestión fue interpuesta por Telefónica bajo la acusación de que Telcel había llegado a un acuerdo de exclusividad con Blue Label México para el uso de terminales Qiubo para recargas dentro de las tienditas a las que llega la red de distribución de Bimbo.

Movistar declinó demandar ante el IFT a la firma del empresario Carlos Slim y desistir de la denuncia que presentó acusando a Telcel a finales del año pasado de haber llegado a un acuerdo de exclusividad con Blue Label México para la operación de las terminales de Qiubo.

El IFT ya había desestimado previamente la demanda de Movistar.

 

 

PRD busca prohibir la instalación de antenas de radiocomunicación en DF

El Economista

Nicolás A. Lucas

24 de octubres de 2014

 

La intención de prohibir la instalación de antenas de radiocomunicación en la ciudad de México es una acción que sólo compete al regulador en la materia, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), y no a una Legislatura local, como pretenden dos diputados del PRD en el Distrito Federal. Se basan en el argumento de que estos equipos tecnológicos afectan negativamente a la salud humana, pero ni la OMS ni la extinta Cofetel han comprobado que así sea.

Una regulación equivocada en la materia, en cambio, impactará a los servicios de telefonía móvil, la penetración de internet y al desarrollo del comercio electrónico, coincidieron expertos.

El Partido de la Revolución Democrática (PRD), a través de dos de sus diputados en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Alejandro Robles y Víctor Hugo Lobo, perfila la presentación de una serie de modificaciones ante la cámara local a la Ley de Desarrollo Urbano y al Código Penal que, de prosperar, prohibirá la instalación de antenas en zonas habitacionales y castigará a las empresas del sector que de manera irregular instalen estos equipos.

Alejandro Robles y Víctor Hugo Lobo, éste último ex delegado en la Gustavo A. Madero, sostienen que una prolongada exposición a las radiaciones ionizantes que emiten las radiobases de telecomunicaciones deriva en enfermedades degenerativas. Citan una investigación de la División de Ciencias Básicas de la Facultad de Ingeniería de la UNAM. El Economista buscó un comentario de esta división de la casa de estudios, pero nadie estuvo disponible para atender la solicitud.

La ciudad de México carece de espectro, de infraestructura y servicios de nueva generación que constantemente demandan los capitalinos y los usuarios en tránsito. Diariamente, según estimaciones de los expertos consultados, 10 millones de personas utilizan su aparato telefónico, consumen datos y saturan las redes de telecomunicaciones disponibles en la ciudad.

La fabricante de equipos de telecomunicación Ericsson asegura que 90% de los usuarios de telefonía móvil en la ciudad utilizan su teléfono para acceder a Internet y 34% lo usa por más de tres horas al día, según datos a agosto de este año. Y la demanda va a la alza, dado que 58% consume videos y otro 42% intenta ya realizar videollamadas, lo que obligará a reguladores y empresas del sector a expandir la infraestructura de telecomunicaciones en la zona del Valle de México.

De acuerdo con Ericsson, 39% de los usuarios “quiere tener acceso a Internet en todo lugar”, pero las compañías de telefonía continuamente presentan fallos en la prestación del servicio, que van desde la insuficiencia del espectro hasta afectaciones a la infraestructura.

El PRD local intentó presentar en noviembre del 2001 una iniciativa similar a las leyes locales que regularían la instalación de antenas de radiocomunicación. En el periodo 2012-2013, el ex perredista Ricardo Monreal intentó lo mismo en el Senado de la República, pero entonces terminó por quitar empuje a su iniciativa tras escuchar las opiniones técnicas de la extinta Cofetel.

En el 2001, el PRD intentó modificar la Ley de Desarrollo Urbano y la Ley Orgánica de la Administración Pública Local, para dar solución al desordenado crecimiento de las antenas de telefonía celular. Su intención poco prosperó.

“Se atiende de manera contundente la demanda vecinal hacia estos artefactos, reivindicando la salud y seguridad”, expuso a la prensa el asambleísta Alejandro Robles en los primeros días de octubre.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) desconoce con certeza las afectaciones que pudieran derivar a la salud humana la radiodifusión de ondas ionizantes.

“La exposición a los campos de radiofrecuencia emitidos por los teléfonos móviles suele ser más de 1,000 veces superior a la de los campos emitidos por las estaciones base, y hay más probabilidades de que cualquier efecto adverso se deba a los aparatos telefónicos”, dijo la OMS en un resumen titulado “¿Cuáles son los riesgos sanitarios asociados a los teléfonos móviles y sus estaciones base?”, de septiembre del 2013.

“Hasta la fecha, no se ha confirmado que el uso del teléfono móvil o equipos tenga efectos perjudiciales para la salud… Tampoco se ha conseguido probar que exista una relación causal entre la exposición a campos electromagnéticos y ciertos síntomas, fenómeno conocido como hipersensibilidad electromagnética”, dijo la OMS en su informe “Campos electromagnéticos y salud pública: teléfonos móviles”, publicado este octubre en su página web.

El Departamento de Ingeniería en Telecomunicaciones de la UNAM hizo este comentario a El Economista: “no está probada” alguna afectación causada por la cercanía de las antenas de telefonía móvil en zonas habitacionales.

“Atreverse a decir que una onda electromagnética causa daños a la salud es muy aventurado. Se recomienda que las transmisiones no pasen de cierta potencia, pero de ahí a atreverse a decir que causa daños, es muy difícil de demostrar. Deberíamos esperar a que nuestra generación muera y así hacer una estadística. Un horno de microondas tiene una potencia de 1,000 Whats y una estación transmite a 30… Son equipos que son extranjeros y esos equipos cumplen con leyes de otros países donde están más obligadas (las empresas proveedoras). Las antenas están a ocho o diez metros de altura, alguien tendría que estar a 30 centímetros y frente a frente a (la antena) mucho tiempo para que pasara algo”, comentó el jefe Departamento de Ingeniería en Telecomunicaciones de la Facultad de Ingeniería, Víctor García Garduño.

Faltan normas de regulación

En México, la nueva legislación en telecomunicaciones faculta en exclusividad al IFT como ente regulador en la instalación de antenas de radiocomunicación. Sin embargo, faltan normas y adecuaciones específicas para regular con precisión este tipo de instalaciones, tarea pendiente para el naciente regulador.

“Este tema es de carácter federal y en ese sentido hay una autoridad reguladora. Si el PRD pretende una iniciativa de reforma, tendría que ser una iniciativa de reforma a la nueva ley de telecomunicaciones. Si tiene interés, tendría que ser una reforma dentro de esa nueva ley, o recomendar al IFT que observa una deficiencia. No hacerlo, es saltarse una competencia”, dijo, abogado especializado en telecomunicaciones y director general de la Asociación Mexicana de Derecho a la Información (Amedi), Agustín Ramírez.

“Es un tema de regulación federal que sólo compete al IFT. (El PRD) debe buscar una política que armonice con el IFT, debe trabajar con ese liderazgo (del regulador). Tener una ley eficiente que piense en el ciudadano, en la seguridad y sin corrupción, porque se pierde mucho dinero cuando las empresas despliegan antenas —tramitología de leyes locales”, dijo Jorge Fernando Negrete, director general en Mediatelecom Policy & Law.

La desaparecida Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) presentó en el 2013 un estudio sobre la instalación de antenas para telefonía celular. El regulador desconocía entonces el número de esos equipos en operación, porque las compañías no estaban obligadas en informarlo.

A la fecha se desconoce el número de antenas en operación. Especialistas sostienen que el país demandará mayor capacidad en los equipos de telecomunicación y que el “ideal” en operación ronda las 800,000 radiobases. Se desconoce la cifra con precisión.

“El Congreso y la ALDF tendrían que allegarse ante la opinión del IFT y verlo. Ricardo Monreal presentó una iniciativa similar, pero para Pueblos Mágicos. Nos acercamos con el senador Monreal y le explicamos que lo que estaba proponiendo no beneficiaba a nadie. Es una falta de información por falta de la ALDF y quien la haya impulsado. Me parece que hace falta una norma de criterios del IFT para la instalación de antenas, nosotros lo intentamos en Cofetel pero teníamos otras atribuciones y no se concretó”, comentó Mony de Swaan, ex titular de la Cofetel.

“La realidad es que no existen normas sobre la potencia de las antenas que transmiten señales. Es una encomienda que debería emitir el IFT, que establezca los límites máximos transmitidos por una radiobases para que no haya desentendidos”, añadió Víctor García Garduño.

El Gobierno de México trabaja para la pronta puesta en operación de las bandas de frecuencias de 700 Megahertz (MHz) y de 2.5 Gigahertz (GHz), espectro que demandará el uso de nuevo equipo y para lo cual empresas como Nokia, Alcatel, Ericsson y Huawei ya realizan pruebas a pedido de la SCT.

“Falta por administrar las bandas de 2.5 y de 700… Justo el IFT está trabajando para echar la red troncal y habrá que regular. Esto es competencia del IFT, de nadie más. Como está, esa iniciativa no debería prosperar”, dijo Agustín Ramírez.

“México no ha liberado esas bandas aún. En el tema de radiobases no todo está determinado y el consumo de datos indica que hay retraso (en infraestructura) y no retroceso en consumo. El PRD debería estar presentando una verdadera agenda digital integral para la ciudad de México, porque eso hace falta”, agregó Jorge Negrete.

El Economista intentó comunicarse con el diputado Víctor Hugo Lobo para conocer su iniciativa de regulación, pero no fue posible contactarlo a través de su equipo de prensa. El IFT atendió una solicitud de opinión y confirmó que dará seguimiento a la misma.

nicolas.lucas@eleconomista.mx