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Espionaje y rivalidades políticas
La Silla Rota
Rodolfo Ruiz
2 septiembre 2014
En el estado de Puebla han comenzado a darse los primeros enfrentamientos políticos de cara a la sucesión gubernamental de 2016. Uno de estos pleitos tiene como protagonistas al diputado federal priísta Enrique Doger Guerrero y al gobernador panista Rafael Moreno Valle.
La disputa va más allá de un ajuste de cuentas del morenovallismo hacia su otrora aliado priísta, pues tiene como epicentro a figuras nacionales y un asunto espinoso: La intervención ilegal de telecomunicaciones.
Doger Guerrero ofreció este lunes una conferencia de prensa y ahí no sólo denunció que sus oficinas fueron asaltadas de manera extraña por ladrones que se llevaron su computadora personal en lugar de otros artículos y aparatos electrónicos de mayor cuantía, sino que el robo había sido perpetrado por un comando dedicado al espionaje político.
El ex presidente municipal de Puebla y ex rector de la BUAP responsabilizó del hecho al gobernador Moreno Valle, al revelar que con recursos públicos financia una red de espionaje en la que estarían involucrados personajes como Jorge Carrillo Orea, director fundador del CISEN; Joaquín Arenal Romero, ex delegado en Puebla del CISEN, y Eukid Castañón Herrrera, diputado local y ex contralor del estado.
Los graves señalamientos del legislador priísta tuvieron eco en un sector de la prensa local, ante la ola de robos de equipos de cómputo del que han sido víctima en los últimos meses periodistas, figuras políticas y activistas opositores o críticos del mandatario estatal, entre los que sobresalen la panista Ana Teresa Aranda, el ex juez Enrique Romero Razo, el constructor Aristeo Reyes Hernández, el líder sindical de los telefonistas Marco Antonio Mazatle Rojas, y los periodistas Luis Enrique Sánchez y Elmer Sosa.
¿Qué llevó a Enrique Doger a poner el centro del debate el tema del espionaje político?
La respuesta a esta interrogante está, quizás, en lo que no dijo Doger en su conferencia del lunes, pero de lo cual está ampliamente enterado: De la rivalidad entre el gobernador Moreno Valle y su poderoso coordinador de fracción en la Cámara de Diputados, Manlio Fabio Beltrones, y de un reciente conflicto entre ambos, a propósito de las amenazas que el diputado Eukid Castañón hizo a ciertos legisladores priístas a finales de julio, luego de la rueda de prensa que estos ofrecieron sobre el caso Chalchihuapan.http://www.eluniversalmas.com.mx/columnas/2014/07/108055.php
Beltrones se comunicó a Casa Puebla para hacerle saber a su inquilino que no iba a permitir que uno de sus operadores amenazara a los diputados priístas de Puebla en las instalaciones del propio Poder Legislativo.
Tras el reclamo, Eukid Castañón bajó el perfil y desapareció de la escena pública local, pero no del radar de Manlio Fabio y su intricada red de informadores, que ya que lo ubican como el operador político y electoral del gobernador Moreno Valle, como el responsable del espionaje y la intervención de celulares y otras telecomunicaciones y a su búnker de la colonia La Paz como su principal centro de operaciones.
Otra cuestión que Enrique Doger conoce, pero que omitió en su conferencia de prensa, es la animadversión de Manlio Fabio Beltrones hacia uno de los espías políticos del gobernador Moreno Valle: El ex delegado del CISEN en Puebla, Joaquín Arenal Romero, quien regresó a la entidad del brazo del anterior secretario de Seguridad Pública, Ardelio Vargas Fosado.
Joaquín Arenal y Ardelio Vargas se conocieron en el Centro de Investigación y Seguridad Nacional, fundado por el hoy asesor del gobierno del estado, Jorge Carrillo Olea, a finales del sexenio delamadridista.
Arenal laboró en el gobierno de Vicente Fox como director de Investigación del CISEN, cargo que dejó al ser descubierto interviniendo comunicaciones del ex gobernador de Chihuahua, Patricio Martínez García. Luego fue designado jefe de la Oficina de Investigación Aduanera de la Administración General de Aduanas, de la que salió tras la confiscación de 207 millones de dólares al empresario mexicano de origen chino Zheli Ye Gon, producto del tráfico de efedrina y otras sustancias usadas para elaborar metanfetaminas, y en 2008 regresó al CISEN como director de Seguridad, es decir el área de contrainteligencia, desde cual se dedicó a espiar a personajes como el entonces senador Beltrones.
Algunos detalles de este último escándalo, por el cual incluso fue enviado a prisión Luis Miguel Dena Escalera, ex delegado del CISEN en Chiapas, Chihuahua, Estado de México y el Distrito Federal, se han publicado en la prensa capitalina, como el diario 24 Horas.
Joaquín Arenal es un personaje con un pasado oscuro, en cuyo expediente en poder de la PGR hay incluso antecedentes de abuso de autoridad, asentados en esta averiguación AP/PGR/TAMPS/REY-UNAM/4799/2011.
Junto con Héctor Arrona Urrea, actual director general del Centro de Análisis y Prospectiva (CAP) del gobierno del estado, Arenal es uno de los operadores del espionaje político en Puebla al servicio del gobernador Moreno Valle.
¿Ahora entiende por qué el diputado Enrique Doger centró sus acusaciones en Eukid Castañón, Joaquín Arenal y Jorge Carrillo Olea, y quién lo respalda para traicionar y encarar a quienes antes lo cobijaron en el morenovallismo?
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